martes, 21 de octubre de 2014

marea


Cuando el sol baja y tu horizonte ante mis ojos,
un escalofrío recorre mi estómago.
No es malo, no es nada malo.
El miedo de lo lindo y la sonrisa a punto de estallar.

martes, 14 de octubre de 2014


Se despertó temprano, abrió los ojos mirando hacia la nada. Luego, como todos los días, se preguntó:
¿ qué será de mí, de esta vida, de este cuerpo en lo que resta de los días?, de pronto un escalofrío recorrió su cuerpo inerte. Sentía aquel joven el paso del tiempo enigmático, sentíase estar naufragando en el viento y volando en el agua y en lo más profundo de su ser nada podía con el transcurso del tiempo.
Levantándose lentamente, preocupado, camina sobre el piso de espuma con un miedo desbordante, con un fracaso de no poder controlar lo que vendrá, porque no lo sabe, hay tantas cosas que si, hay otras que no, ya de nada sirve correr, tampoco descansar, no sabe que hacer, en el enigma de la vida ve su biografía pasar.

martes, 7 de octubre de 2014


En la tarde, mientras escucho música desde hace un buen rato. Reflexionando en la ducha, esa ducha que se lleva todo y trae una tanda de proyectos y pensamientos que quieren salir a brillar.
Reflexionando mientras me cambio, varias canciones pasaron, algunas se vuelven en recuerdos lejanos, otras traen un nuevo camino lleno de luz, otros provocan un reflexionar infinito. Algo hay que hacer.
Por todas las conclusiones a las que derivo, persiguiendo el objetivo de la tranquilidad emotiva, creo dar marcha atrás cuando un escalofrío nostálgico me invade. Y no sé si está bien, pero no está mal.
Decido que charlar y quedar bien con el pasado no es mala idea, esa situación de cerrar situaciones y saltar hacía otros espacios en dónde si los caminos se cruzan, podrán saludarse y seguir normal.